Pan y pan tostado

Cuando tostamos el pan lo que hacemos es prácticamente prolongamos la cocción del almidón del pan un poco más, lo que facilita su digestión. Así que aparte de disfrutar de su textura crujiente también mimamos el sistema digestivo, que siempre va bien. No hablamos de las tostadas que se compran envasados  muchas veces con aditivos y azúcar añadidos, sino del pan blanco o integral sin aditivos tostado en casa. No tenemos que obsesionarnos con el pan tostado tampoco, lo que recomendamos es una combinación de pan fresco y pan tostado a lo largo de la semana.